1. Vive una experiencia mucho más inmersiva
Los soportes permiten adaptar la posición de tu TV para ampliar el ángulo de visión desde cualquier parte del salón y disfrutar de una experiencia inmersiva.
2. Cuelga tu TV donde quieras
¿Estrenas televisión y no sabes dónde ponerla? Con un soporte de pared podrás colocarla donde quieras, de forma rápida y fácil.
3. ¿Quieres un salón de diseño?
Integra la tele como un elemento de diseño más, evitando utilizar muebles auxiliares y ocultando los antiestéticos cables.
4. Aumenta la estabilidad y evita caídas
Si temes que los más peques de la casa, tu mascota o simplemente un accidente doméstico puedan acabar con tu televisión en el suelo; cuélgala, ganaras estabilidad y evitarás riesgos.
5. Mejora tu postura ante la TV
Coloca la televisión en la posición más natural de visión y para evitar problemas de salud como contracturas, dolores de cabeza y de cuello.